Un joven mago, triste por la marcha de su hermano, recibe la inesperada visita de un pequeño y astuto huésped.
Haciendo honor de forma moderna y distendida a los trucajes de George Méliès, este cortometraje pretende ser una revisión sutil pero efectiva algunos de ellos. Convirtiendo lo bidimensional en tridimensional, o reimaginando las paradas por sustitución.